Paja


Una casa con muchos rincones es siempre un problema cuando hay que coger la fregona. Este domingo sin embargo le encontramos otros usos a los bajos de la alfombra.
Sé que como anfitrión hay ciertos mínimos a cumplir pero curiosamente, pese a no observar ninguno, los invitados desean volver.
Alfil.
Hogar dulce hogar, 2008.
7 comentarios:
La próxima vez que este bello animal quiera ir a retozar a tu establo, te pediría que sean 5 las cuerdas con las que le marques un pentagrama en la piel. Luego con el látigo llénala de música...
que fotos más preciosas....
esas cuerdecicas marcadas!!!
y encima, un gran texto que acompaña...
qué más se puede pedir?
bon día!
Deliciosas imágenes, felicitaciones!
«Si las puertas de la percepción se abriesen, todo aparecería ante el hombre tal cual es: infinito.»
Aún sabiendo que puedo parececer repetitiva respecto a los demás comentarios, no quiero quedármelo para mí: qué fotos tan maravillosas! y el texto, perfecto para acompañarlas... o son ellas las que acompañan al texto?
Un beso!
te agregé al blog sin comentarte nada pese a leerte, un cordial saludo.
preciosa foto :)
amelie*
No lo puedes evitar dantonmaltés, gozas de una sensibilidad exquisita. Tan delicados como somos, acabaremos tomando cervezas en cualquier tugurio hasta altas horas de la madrugada rodeados de almas sensibles.
Y por pedir que no quede Teba ...
En cuanto a tí Belmar, habrá más fotos y seguiré acompañandolas de texto arkana al igual que tu acompañarás el blog en el futuro supongo.
En cuanto a tí Justine, en justa correspondencia he añadido tu blog a mis favoritos a traición, con alevosía y nocturnidad.
Y a tí amelie, me perdonarás pero, prefiero dejarte "colgada".
Alfil.
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